Ekonos

Autor: Victor Catala
Editor: Ludic
Año: 2004
Jugadores: 2 a 6
Duración: 1 hora
Complejidad reglas: media


Normalmente, a consencuencia de la experiencia, soy bastante excéptico cuando veo un juego de un autor español desconocido. A veces tanto que paso de largo sin ni siquiera darle una oportunidad. Esto es precisamente lo que me pasó con este juego.
Afortunadamente, en su visita a Bilbao, Pol Cors que se había hecho con los derechos para distribuir el juego me invitó a probarlo.

Aunque la fuente por la que me llegó ya se puede considerar lo suficientemente fiable como para pensar que se trata de un buen juego, ciertamente lo que a primera vista más me llamó la atención es que para tratarte un juego de simulación económica el reglamento era mucho más sencillo de lo que cualquiera puede esperar en un juego de ese tipo.
Todas las reglas, con diagramas incluidos, se hallaban en una única hoja tamaño folio. No pude esperar mucho tiempo para abrir la caja para echar un vistazo a su contenido. Y tras leerlas no deje de pensar que si en la práctica funcionaba éste seguramente debía ser el mejor juego hecho hasta la fecha por un autor peninsular. Lamentablemente el juego es demasiado serio, casi abstracto, como para poderlo probar con cualquier grupo de jugadores, así que tuve que esperar al momento propicio para enseñarselo a mis compañeros de juego de Bilbao.

El juego consiste básicamente en lo siguiente. Se juega sobre un tablero que es un grafo irregular que representa un mapa de Europa, aunque esto último importa poco y cualquier otra cosa hubiera valido. Además el tablero tiene una zona para marcar las acciones que tiene cada jugador en cada una de los 6 mercados y otra pequeña zona para ver la proximidad a la que se encuentra un mercado de porder expandirse.

Se juega un número fijo de turnos (dependiendo del número de participantes) pero básicamente al inicio de cada turno a cada jugador se le da cierta cantidad de unidades monetarias (es tan abstracto que no hablamos ni de dolares ni de euros ni de ninguna otra moneda en particular) y un número fijo de cartas que en cierto modo pienso yo que su objetivo es ofrecer conocimiento de los mercados a los jugadores.

Sin entrar en las reglas en detalles un jugador en su turno tiene que jugar una carta para mover el estado de los mercados y opcionalmente comprar una acción de un mercado y también vender una acción de un mercado y todo esto en cualquier orden. La elegancia del juego se ve precisamente aquí. Comprar una acción en un mercado cuesta tantas unidades monetarias como acciones hay ya compradas en ese mercado más 1 y al vender una acción recibes tantas unidades monetarias como acciones hay en el mercado justo antes de vender la tuya. Así pues si en un mercado hay 4 acciones comprar una te costará 5 unidades monetarias y vender una te reportaría 4 unidades. El que más acciones tenga en un mercado será el presidente y solo se le podrá quitar el puesto cuando alguien le supere en acciones. El presidente es el jugador encargado de cuando sea posible si así lo desea expandir el mercado en cuestión en la dirección que desee.

Al final de la partida, es decir, al concluir los tres turnos. Se recuentan puntos de la siguiente manera. Se mira el tamaño que ha adquirido cada uno de los mercados y cada jugador multiplica el número de acciones en ese mercado por el tamaño del mercado obteniendo así los puntos que le ha reportado cada uno de los mercados. Se suman los puntos obtenidos por cada mercado y se añade también un punto por cada unidad monetaria líquida. El que más puntos obtenga es el ganador de la partida.

Las reglas lo dicen claramente, es un juego serio, y la caja muy fria y los componentes sin significado explícito pero efectivos en la práctica no pretenden ocultarlo.
La estrategia es sencillamente infinita y la realidad del mercado bursatil queda eficientemente reflejado.

Muchas veces se tiende a crear que un juego con pocas reglas no puede dar lugar a un juego muy profundo estratégicamente y no hay más que probar Ekonos para darse cuenta de lo equivocado de este razonamiento. Para ilustrar esto yo solo puedo exponer aquí situaciones que he vivido en mi propia experiencia con el juego pero seguro que otro grupo de personas puede alimentar estas lineas con otras sensaciones. Incluso enseguida uno se percata de que al jugar con diferentes personas uno se ve obligado a improvisar y rediseñar su estrategia para adaptarla a la personalidad o experiencia en el juego de los participantes

Al principio lo que quería es que una empresa fuera solo para mi y que costará caro que alguien comprara acciones en ella para que mi presidencia no corriera peligro y toda mi estrategia se basaba en hacer fuerte a esa empresa. Después me di cuenta que al ser el único jugador con verdaderos intereses en esta empresa el resto de jugadores no tenía ningún reparo en atacarme mientras que en las empresas compartidas por varios todos se unian en su defensa. También pensé que un mercado en el centro de Europa iba a ser más sólido que otros en la periferia pero no está tan claro porque aunque hay más vías de expansión tambien pueden atacarte por todos los flancos. Pero al final y al cabo la esencia reside en saber comprar y en saber vender acciones y posiblemente el efecto que puedes ejercer en los mercados no sea tan importante. Creo que la idea está en lograr predecir cuando un mercado va a coger valor y cuando va a perderlo y comprar y venderlo antes de que la fiebre se apodere de todos los jugadores. Ser presidente tiene su importancia pues da la opción de expandir el mercado y aplastar otros contiguos pero obsesionarse con mantener la presidencia puede ser muy contraproducente.
De todas formas toda la estrategia está tan supeditada al estilo del grupo de jugadores que comentarla resulta casi inútil. Por ejemplo comprar cosas baratas es bueno desde el inicio a la media parte de la partida pues antes o despues cuando otros mercados más caros dejen de ser atractivos estos cogeran valor pero si todos los jugadores piensan igual todos al mismo tiempo compraran lo más barato haciendo que las gangas no existan y entonces la estrategia óptima tenga que estar orientada a vender acciones de empresas sobrevaloradas.

Vamos que en definitva parece que Ekonos ha sido diseñado pensando en todos esos que dicen (yo no me encuentro entre ellos) que un juego económico como el Monopoly es un juego bastante pobre por la excesiva presencia del azar.

En cuento a los componentes, ciertamente no son de la mejor calidad pero un equipamiento de piezas de plástico o de madera no habría aportado claridad a un juego como este y creo que las fichas de cartón a varios colores se asimilan sin problemas desde el primer momento.

Ciertamente creo que de lo poco que hoy por hoy tenemos en España para competir con los mejores juegos europeos, Ekonos junto con Ágora Barcelona son los dos absolutamente imprescindibles.

Por cierto, el autor ha creado un juego sobre la segunda guerra mundial, con la particularidad de que las reglas serán más sencillas y la duración más corta que en el warwage al uso pero igual de realista y al ver Ekonos me lo creo y en cierto modo estoy ansioso por probar su nuevo juego.

Comprar Ekonos

Mi Calificación:

• El Juego: 9
• La Originalidad del Mecanismo: 8
• Los Gráficos y Componentes: 7
• La Adecuación de Temática: 7