Diamant

Autor: Bruno Faidutti, Alan Moon
Editor: Schmidt
Año: 2005
Jugadores: 3 a 8
Edad Mínima: 8
Duración: 20 minutos
Complejidad reglas: baja

Sin entrar en la mecánica Diamant tiene un montón de cosas buenas: pueden jugar hasta 8 personas, es fácil de aprender, vale para casi todas las edades, las partidas son rápidas, los materiales del juego son realmente atractivos y la temática envolvente. Con todo esto no hay mucho que exigir al mecanismo del juego para que para a la mayoría de las personas jugar una partida de Diamant les haga pasar un rato agradable. Aun así la mecánica tiene una idea muy aguda que de por si justifica el juego, o lo que es más, representa todo el juego. Vayamos a ello.

En Diamant somos exploradores que vamos a entrar juntos a 5 cuevas diferentes, una a una pero insisnto en que nos adentramos todos juntos. Vamos buscando diamantes pero sabemos que también vamos a encontrar peligros (de 5 tipos para ser exactos) . Avanzamos por la cueva en busca de diamantes, como vamos juntos el tesoro de cada tramo lo dividimos a partes iguales, y el resto, la parte indivisible la dejamos sin dueño. Sabemos que nos podemos encontrar con peligros y si a lo largo de la misma cueva nos encontramos con dos peligros del mismo tipo tendremos que avandonar la cueva con las manos vacías. Por eso, antes de avanzar un tramo más cada explorador secretamente decide si quiere seguir o abandonar la cueva. Si te marchas puedes guardar en tu cofre todo lo que hayas conseguido y descansar hasta que salgan todos los demás antes de introduciros en la siguiente cueva. Los que siguen pueden seguir obteniendo diamantes que además repartirán entre menos personas y tocarán a más, pero con el riesgo de que salga un peligro que ya haya salido antes en esa misma cueva y perder todo lo conseguido en esta cueva. No obstante y aquí está lo mejor de todo, ¿Os acordais de que los diamantes que no se podian repartir se dejaban en la cueva? Pues bien, los que se retiran que son muy listos, recogen todos los diamantes que se quedaron sin repartir y antes de salir de la cueva se los reparten entre ellos, dejando nuevamente lo que no puedan repartirse.

Así se sigue hasta que hayan sido exploradas las cinco cuevas. El explorador que mejor sepa combinar la valentía y la sensatez será el que al final de la expedición tenga más diamantes en su cofre.

Los expertos dicen que Diamant es un juego del tipo push-your-luck, porque tienes que ir tentando a la suerte sucesivamente. Según consigues algo siempre puedes conseguir más pero al mismo tiempo siempre te arriesgas a perderlo todo. Es desde ese punto de vista que haya quien diga que es el clásico Can't Stop pero con tema. Aunque realmente la parte original de Can't Stop es jugar con las combinaciones que se pueden obtener al sumar parejas de dados al lanzar cuatro dados y en el Diamant la gracia está en la tentación para abandonar la cueva que representan los diamantes que se quedan por el camino.

En lo respecta a la temática no hay nada que decir ya que no hay mejor indicador de la integración de un tema en un juego que poder explicar las reglas describiendo el tema.

Por otro lado, los componentes se de lo mejor que se puede esperar en un juego. Se podría haber hecho más barato pero el hacer meeples-exploradores y cofres para acumular los diamantes es algo que estéticamente se agradece mucho. Aunque desde luego la joya en este aspecto son precisamente las joyas, es decir, los diamantes. Hombre no es que parezcan auténticos (aunque mi amigo Rafa dice que a alguno de los de Afinsa si que se los podrias colar) pero desde luego están tallados y nadie puede evitar la tentación de cogerlos con ambas manos y dejarlos caer abriendolas poco a poco. Si el Niagara hubiera traido algo así sería la bomba, pero claro ese juego ya tenía otros componentes donde invertir.

Como inconvenientes quien guste de los juegos muy profundos podrá decir que la suerte influye demasiado pero como ya dije en mi artículo sobre el azar en los juegos, creo que mientras se creen constantemente situaciones que te obligen a tomar dificiles decisiones no hay porque preocuparse por el azar. Después la caja es demasiado grande para lo que contiene, y esto molestará algo al coleccionista, pero creo que la idea de esto es la de poder guardar los cofres sin desmontar, aunque aun así sobraría sitio.

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Mi Calificación:

• El Juego: 7
• La Originalidad del Mecanismo: 8
• Los Gráficos y Componentes: 9
• La Adecuación de Temática: 9